…Y por transparentar el negocio de las ARS con sanciones por casi RD$21 millones
Dice el refrán, con mucha razón, que quien tiene techo de cristal no puede lanzar piedra al techo del vecino, pues corre el riesgo de que su cobija se quiebre sobre su cabeza, el piso se le mueva debajo de sus pies, o que su historial censurable salga a relucir para vergüenza propia.
Por eso, admiro y me gusta ver a aquellos que aplican los principios de la competencia respetuosa y no desleal, exenta de golpes bajos, aquella que no se vale de zancadillas ni le pone varapalos a las ruedas de otros. Tratar de brillar empañando la vitrina de sus iguales, utilizando medios tendenciados por los intereses a los que responden, canibaliza la imagen de todos, incluyendo a quienes creen que pueden sacar mejor partido.
Qué satisfacción de conciencia da el saber que ganamos un espacio en buena lid, en base a buenas prácticas empresariales, y lo contrario, qué sensación de vacío espiritual, de bajeza moral, da el conseguir objetivos por medio non santo, que en vez de conectarse con el cielo hacen causa común con el Maligno.
La rivalidad bien manejada es beneficiosa cuando saca lo mejor de nosotros para sobresalir, pero si la administramos mal nos convierte en fieras que se abren paso a dentelladas.
De la misma manera, saludo a las instituciones que en cumplimiento de su rol arbitral toman medidas correctivas de saneamiento. Ejemplo de ello es las que viene implementando la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL), las cuales eliminarán de raíz las causas y procedimientos irregulares que originaron que empresas como ARS RENACER, ARS GMA, ARS SIMAG, ARS SEMMA, ARS FUTURO, ARS CMD y ARS MONUMENTAL fueran multadas por un monto total de RD$20,898,800.00.
En lo particular, me identifico plenamente con este esfuerzo de transparencia correccional que redundará en beneficio de todo el sector, en particular con la tecnológica aplicación del reconocimiento facial, la cual imposibilitará la afiliación y el traspaso irregular de administradoras de riesgo de salud, que se facilitaba por la vía manual.
Con ello ya no tendremos que estar a expensas de vendedores inescrupulosos que se saltaban todas las normas éticas y todo proceso de sujeción a las leyes que rigen el ramo.
Considero, que en aras de mantener un buen clima de competencia, todas las ARS deben comprometerse con la observancia, al pie de la letra, de las acciones y medidas que impliquen avances institucionales que ponen orden y disciplina, y evitan que se repitan penalizaciones por motivos, muchas veces, no intencionales.
